Descripción
En cualquier estudio profundo de las Escrituras, la obra de Dios como maestro narrador y compositor emerge de los patrones profundamente complejos de la Biblia. Abarcando muchos siglos y muchos autores, la Palabra de Dios está repleta de ricos misterios que sólo se vuelven claros y consistentes con todo el contexto de la Biblia en mente. Su firma divina es evidente en la forma en que la Biblia repite los mismos mensajes y conceptos en circunstancias muy diferentes en la historia de los patriarcas, Israel y los apóstoles.